A mis alumnos Plantel Norte

"Yo siempre quise tener
excelentes alumnos
y me esforcé en ello

hasta lograrlo." 
Sergio Guillén 
Yo no tengo dudas de que ustedes son, han sido y serán una parte muy, muy importante en mi vida. Tanto en mi vida profesional, como en mi vida personal. Con ustedes, mi vida atravesó por muchos caminos distintos: desde la paz, la abundancia, el crecimiento y el aprendizaje, hasta la desesperación, las injusticias, los errores, los baches y la búsqueda por ser mejor. Yo, no tengo dudas de ustedes, sé y estoy convencido de ello, que ustedes son futuro, son promesa, son esperanzas… otros, ya son realidad pero con la humildad del querer hacer y del querer ser. Yo, no tengo dudas de que ustedes han marcado mi camino, mi destino y mi presente, de que ustedes han sido tan especiales para mi, como mi familia misma, como mis amigos más cercanos, como mis hijos a quienes respeto y que me respetan casi siempre. Yo no tengo dudas de ustedes ni de lo que he sembrado ahí, en sus manos, en sus ojos y en sus corazones. He procurado darles lo mejor que he podido, lo mejor que sé y la dignidad y esperanza emancipadora de un futuro de convicción y de valor, de entregarles como estafeta el ímpetu de encarar al mundo y dominarlo….

Así, mis queridos alumnos, yo, no tengo dudas de ustedes y no las tendré, porque han demostrado madurez e inmadurez, alegrías y enojos, verdades y mentiras, risas y llantos, porque han demostrado ser humanos comprometidos, personas alegres y leales… personas dignas de ser amadas.


Me voy con ustedes y su recuerdo, con sus imágenes, con el aprendizaje que hice por ustedes, me voy con alegría, me voy con dignidad, me voy, pero me voy conforme de haber trascendido, de haber sido odiado, admirado y hasta necesitado. Me voy con ustedes a cuestas, con sus voces y con sus gestos, me voy recordándoles que siempre, siempre y en cualquier lugar, en cualquier empresa realizada, siempre habrá un payaso amenazante, siempre tendrán la amenaza certera de que cuando las cosas no se hacen con nobleza ni con lealtad, nunca, nunca resultarán. ¿Que se los carga el payaso? Sólo si se dejan.

De verdad, los quiero mucho.

Agosto 2011


 
 
 
 
 
 
 
 
 

Sueño de una noche de verano y de otoño y de todos los días

- Lálalala… amooooor!!! Hola, ya llegaste??? Amoooor.

- Si, aquí estoy, no viste el coche??

- Ups, no, por eso pregunté

- Haaaay ya ves?? Todo tú, tú, y siempre tú. Cuándo vas a dejar de ser así, o sea, no piensas que también existimos otros a tu alrededor?? Ya me cansé, ya estoy haaaarrrrrte de tener que darte gusto siempre en todo, o sea, si no estacioné el auto donde tú lo veas, ya, es porque no te quiero o porque traigo algo en tu contra… Sergio, yo no te doy problemas, nuuuuunca te doy problemas y tú solamente piensas en ti.

- Oye cálmate, qué te pasa?

- Cómo cálmate?? Si no estoy haciendo nada? Ahora ya dices que me pongo bien loca… no, ser, de verdad que así no.

- Qué pasa??’ estás bien??? Solo quería saber si habías llegado, si no, para hacer algo de comer. Pero ya, bueno, ya llegaste. Ya comiste?? O vamos por algo???

- Oye ser, y además quieres que haga de comer? Oye, si también tengo un buen de trabajo, la ofi es una pinche locura, la Fabiola es bien pendeja y la otra tarada, me haaaarrrrta con su pasividad. Y el Lic Martín, todo así, todo mensito…

- Pues relax, ya,olvídate del trabajo un rato, va??? Ándale, te invito una hamburguesa.

- Hay no, una hamburguesa no, si ya tengo que ir al nutriólogo, mira, desde que regresé de Buenos Aires, he subido como 8 kilos, no inventes.

- Mhhh, bueno, vamos por otra cosa.

- O si quieres voy yo sola, tú descansa, quédate aquí, haz de venir super cansado, vienes desde Santa Fe y has de venir harto, verdad cosa??

- No, ando chido. Ya sabes ke dar clases me relaja. Vamos juntos cosa.

- Oye, ya te puedo saludar???

- Sipi… pero ya ves cómo te pones?? Y hasta ni saludas.

- Haaaay, haaaaay ya vas a empezar… no, no, no… no kiero hablar de esto, mejor voy yo sola, así respiro y me relajo y ya. Te traigo algo???

- Mhhh, bueno, si, traeme una crepa de cajeta, vale??

- Oye, es verdad lo ke estás diciendo??? Vas dejar que vaya yo sola???

- Bueno, cosa, vamos, ándale. O voy yo.

- Ser, ya ves cómo te cuesta trabajo disculparte??? Tanto ego no te deja, de verdad.

- Bueno, ya discúlpame, no quería ofenderte, me perdonas??

- Ser, no sabes ni lo que estás diciendo. Llegas todo enojado, discutiendo, que dónde dejé el coche, que si ya había hecho de comer… y yo??? Yo qué Sergio??? Pensaste en mi??? No, claro, eso no te preocupa, verdad???



Y eso es tooooooooooooooooooooodoooos los días!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

la Incertidumbre es una certeza

Yo no puedo vivir con la incertidumbre de no tenerte o tenerte también. No puedo con la idea de la negación tajante ni con la idea de la posibilidad eterna. No puedo contigo ni sin ti puedo. No puedo tenerte en imaginación ni en persona saberte posibilidad.
No puedo conmigo en soledad de ti, ni contigo puedo en sueños de ti. Solo puedo tener la certidumbre de lo incierto, la certidumbre de que te adoro como a noche estrellada y como cielo rojo en el campo.
Solo puedo tener la certidumbre de ti en sueños y en posibilidad mágica y real, solo puedo tener certidumbre de tu boca y de tus ojos que me gritan a voces que te bese, que te abrace, que me vuelva uno contigo y en ti.
Solo puedo tenerte vaga y difusa porque mis ojos son vagos y miran difuso, solo puedo tenerte verde porque mis ojos miran verde. Solo puedo tener la certeza de que me haces falta y de que soy feliz de escuchar tus reclamos, de escuchar tus abrazos y de escuchar tus miradas.
Certeza, incertidumbres, negaciones e imaginaciones; recuerdos y anhelos, viento en el rostro que al rozar grita y besa. Fuegos de leña alegre que atestigua sudores y amores.
Lugares llenos de horas de gritos y luces, cervezas y vinos mudos que abolen la soledad, fríos de colores y soles que pintan de rojo y de ardores gozosos.
Certezas. Esas son mis certezas, certezas que hablan de futuros producto del presente, futuro proyectado camuflado del pasado.
Certezas de mi amor y de mi fe en tu voz que me acaricia y me arropa, de tu voz que me desgarra y destroza generando miles de partículas que te envuelven en besos y en colores. Te quiero y esa es mi certeza. No, te amo, esa es mi certeza…

El ser consciente.


La conciencia es un acto de inteligencia, es un acto de sensibilidad y de percepción que va más allá de lo físico. La consciencia tiene que ver con la manera de percibir el mundo y la interacción que tenemos en él, de tal manera que nuestra consciencia o el nivel de consciencia, depende de nuestras relaciones contextuales, de nuestros referentes ontológicos y de nuestras perspectivas. Por supuesto que entre mayor sea el nivel de información que se posea del mundo, mayor será el nivel de consciencia, sin considerar como protagonista el nivel de instrucción formal, ya que la educación académica no provee a la conciencia de materia suficiente para crearla, sino para saber utilizarla. ¿A qué me refiero? Es simple darnos cuenta de que somos seres sociales y que dependemos de nuestros aprendizajes para poder convivir en grupos, por ello es que buscamos el arraigo en diversos ámbitos de relaciones interpersonales, y que vayan de acuerdo a lo que hemos absorbido de nuestro entorno; primero sin nociones o razones que argumenten de manera consciente los motivos de dichas decisiones, posteriormente a este proceso, se encuentra un filtro intelectual motivado principalmente por los efectos de las experiencias, de ahí que la elección “consciente” está matizada por una larga historia de experiencias familiares e interpersonales en general.

Suele utilizarse al entorno físico como un símbolo de integración social lleno de signos representativos de su cultura, así que los satisfactores psicológicos dependen de los satisfactores físicos encontrados y cómo se han relacionado con el individuo. La consciencia, como tal estará pigmentada del entorno cultural, del entorno físico y de los satisfactores inmediatos. El SER consciente significa conocer plenamente ese entorno y los efectos producidos en el individuo mismo, así como los efectos provocado por el individuo en el entorno; o sea que la consciencia implica el poderse dar cuenta de cómo somos, por qué somos y qué hacemos en nuestro entorno. La consciencia no cuestiona a la inteligencia, sino que la integra como un vehículo trascendental de incorporación funcional a la realidad y cultura. La educación académica sí cuestiona a la consciencia, pues supone que ésta depende del nivel de instrucción, sin embargo, sabemos que en la escuela no se enseña a vivir, por lo tanto, en la escuela no se adquiere consciencia, si no es a través de las experiencias de vida.

Ser consciente de sí mismo es más complicado que ser consciente del entorno, porque el entorno no ha dependido de mí, de tal manera que puedo adaptarme más fácilmente a lo que no es producto de mis actos porque no requiere de un esfuerzo intelectual de encodificación (creación propia), si no solo de decodificación (aprendida).

La consciencia crea y la consciencia destruye. La consciencia y la inconsciencia son dualidad. Son génesis y apocalipsis del hombre mismo y de la emancipación espiritual anhelada; así, puedo afirmar que la consciencia es gozo y la inconsciencia es simple reflejo.

Basado en:
 Frederich Nietzche. Mala conciencia y [auto] destructividad humana.
Sigmund Freud. Psicopatología de la vida cotidiana. -las razones de los olvidos mentales, la causa de las equivocaciones en la conversación o en la escritura, los actos fallidos, las supersticiones-.

Lloro

 Lloro por la lluvia que al mojarlo todo, moja también mis emociones. Lloro por la ausencia de ti, por la ausencia de lo que antes fue, lloro por la añoranza del pasado, lloro por la ausencia de ti, por la falta de admiración lloro, lloro por la intolerancia, por los juicios lloro; lloro por llorar. Lloro por miedos y por valentías lloro. Lloro por justicia, lloro por la injusticia, lloro por amor y por desamor es que lloro. Lloro, simplemente lloro, lo lloro todo. Lloro tu fotografía y lloro tu voz, lloro tu recuerdo y tus obsequios lloro. Lloro por ti, por tu beso, lloro por tu boca ausente y por tu voz presente. Lloro por cobarde y por valentía es que lloro. Lloro y no sé más que llorar, lloro y derramo lástimas y ánimos, lloro y mi llanto llora en sí mismo. Llora mi boca tu beso vacío de palabras, llora mi lengua tu piel de ausencias. Lloro yo y llora cada parte de mi, lloro y lloraré siempre, porque siempre es que existirás y lloro por eso. Lloro con fe y con alegría lloro; lloro con dolor y con placer es que lloro. Lloro lluvias y lloro llantos, lloro luces y sombras lloro, lloro tiempos y presencias, lloro ausencias y vacíos lloro, pero lloro, lloro siempre, lloro triste, lloro solo. Y me alegro de llorar, lloro de alegría de tener llanto y de mi ausencia lloro. Lloro lluvia y mis emociones mojan con llanto. Lloro, pero lloro bien.

Ignorancia

¿Hacia dónde vamos con tanto amor y con tantos sueños? ¿Qué esperamos obtener de cada beso y cada pensamiento? ¿Que hacen en nuestras almas cada lágrima y cada grito? ¿Qué esperamos obtener de Dios hablando a través de nuestros cuerpos? ¿Qué nos falta? ¿A dónde pretendemos llegar? ¿Deseamos algo o no lo sabemos aún? ¿Tenemos esperanzas reales o solo sueños y viajes imaginarios acerca de lo que nos gustaría? ¿Necesitamos tiempo aún? ¿O es por el tiempo que nos somete, la razón de nuestro suplicio? ¿Nos suplicamos por desesperación, por ignorancia o por soledad?

¿Por qué se callan las palabras?

La voz es el vehículo humano que utilizan las palabras para transitar en viajes preciosos de nubes retóricas y océanos denotados, por desiertos confusos y por infiernos necios. La voz es la utilización de las palabras materializadas en sonidos y en contextos. De tal manera la voz, lo que uno dice está envuelto en matices de cultura, en matices de contexto, en matices de intenciones y en matices del pensamiento.

Cuando la cultura se encuentra mutilada, se vuelve obvio que habrá rasgos inconclusos que deberán ser construidos arbitrariamente y desde las posibilidades intelectuales de quien lleve a cabo dicha práctica. Y si los contextos se tornan ajenos entre quien emite y quien recibe, ocurre el mismo fenómeno de parcialización no solo de los signos ocupados, sino también de los referentes y de los contenidos globales, limitándose la comunicación a un simple diálogo vacío de simbolismos importantes y lleno de vacío de ausencias semánticas emancipadoras.

La función de intencionalidad se encuentra envuelta en las funciones del discurso y de su estructuración, haciéndole provechoso para el individuo en tanto constructor de realidades, de pensamientos o de ideas; mientras que de la misma manera, puede ser simplemente paliativo de sensación de bienestar al no existir compromisos mutuos en el intercambio de signos, por ejemplo en una charla informal con un taxista acerca del calor o del tráfico de la ciudad.

Cuando las intenciones buscan algo importante y rechazan la futilidad, banalidad y superficialidad, el pensamiento humano dota a la voz con un discurso estructurado capaz de llevar en sí a la verdad, al contexto y al rasgo cultural propio, siempre que el receptor conoce previamente los fundamentos o estructuras culturales, psicológicas y contextuales del emisor; de lo contrario, el discurso se reduce a frivolidad y será tratado de manera aislada. Por ejemplo, una madre que habla de su hijo como un joven que no obedece y es grosero, puede considerarse desde un punto de vista parcial si se desconoce el origen de la problemática y el trato que se le ha dado anteriormente.

El último rasgo que envuelve a la voz es el del pensamiento, y menciono que es el último rasgo porque el pensamiento está manipulado por los elementos anteriores, el pensamiento es resultado de la combinación de la cultura, de los contextos y de las intenciones tanto de quien suele emitir, como de quien suele recibir. Aquí la inteligencia (asunto ajeno al pensamiento para los fines de este trabajo) no es juzgada, simplemente es subordinada y tratada en su justo término, que sin duda refiere a necesidades de la imaginación concretas y simples, como puede ser la relación existente entre emisor y receptor por ejemplo, la relación entre un médico y su paciente o entre hermanos, incluso el funcionamiento es distinto entre relaciones de noviazgo o matrimonios. Lo que pensamos al emitir una voz, no depende de la inteligencia que tengamos, pero sí depende de las experiencias previas y de lo que nos pueda unir con nuestro interlocutor.

Las palabras suelen callar siempre por decisión propia. Las palabras no son calladas a menos que se asesine. Las palabras no callan, porque son entes vivos y como tales, pueden cansarse de luchar y luchar, pueden cansarse de seguir siendo, quizá porque llegan a los sordos de corazón, o porque llegan a manos que se sienten amenazadas y destruyen en consecuencia. Pero las palabras no callan, solamente bajan la voz y se dispersan lentamente, muy despacito para resultar efectivas en donde no haya sordera ni haya estupidez.

Las palabras no callan, porque callaría el espíritu y el espíritu ni calla, ni muere, ni se traiciona a sí mismo.

Sabiduría Semiótica

¿¿¿Semiótica, y eso ke es???

Signa a tu madre, ¿es una grosería? No, solo una petición de bautizo

La mamá signo, a su hijo signo: No me contextes que soy tu madre

Cuando quieras amarme, ya estaré en un contexto diferente, así que te signas!!!

¡Ash, deja de estarme signando!

Los signos del zodiaco: + para sumar, - para restar, x para multiplicar siempre y cuando eso lo usa Acuario, Tauro, o Leo...


Quisiera ser un microbito... yiaaaak, qué mala rola!!! Eso es SEMIOFOBIA!

Semilogía a la Juanga através del signo de igual: Te pareces tanto a mi, que que no puedes engañarme...

Tu metalenguaje es una apología semántica propia de la paradigmática relación catártica que acostumbras usar para hacerme creer que eres muy chingón.

Me preguntó el profe y por no contextar correctamente, me signó...

La semiótica y la histérica, causan el mismo efecto: repulsión

La metalinguística es a donde quieren llegar las lenguas en una carrera

Aaaaatención, Re-ferente, marchen!!


¿No que no me amabas? ¿y qué signados haces aquí???


Le dije a mi diccionario: Significas mucho para mi.


El papel de un diseñador en la industria

Todas las empresas tienen necesidades de comunicación en cualquier nivel, desde simplemente a nivel interno en cuanto a su papelería cotidiana (hojas membretadas, recibos, ordenes de pedido, facturas, y muchas otras formas impresas) que sin duda, requieren de un diseño adecuado que de identidad a la empresa y por supuesto que esto se reflejará en la sensación de arraigo y por supuesto, en la identidad de los colaboradores de la empresa.

Recientemente, platicando con un director de área, observé un conflicto y me di cuenta que es un problema sustancial muy común en las empresas. Este problema se llama “personalización”, “estilo”, “sello propio” o incluso, “celo profesional”.

El problema de la personalización o el sello propio, radica en que los dirigentes se sienten libres de hacer las cosas a su propio estilo, con su toque personal, de tal manera que haciendo una analogía con los trabajos escolares, un alumno que desea hacer “ver bien” a su trabajo, le pone stickers, folders de colores, o hasta diamantina y piedritas de colores, creyendo que esto mejora y caracteriza a su trabajo. En este mismo rubro, puedo incluir a aquellos que hacen sus trabajos escritos con escasos conocimientos de los procesadores de texto y no se preocupa por los márgenes, cornisas, pies de página, folios, sangrías, interlineados, tipografías o inclusión de imágenes. En el caso de una empresa, que es el tema que nos interesa (y desde el cual puede establecerse el lineamiento para ser ocupado por un docente en sus clases) esto no puede ser posible. Permitir que cada persona haga con el recurso que será impreso (aún un memorándum) lo que considere adecuado, es una aberración funcional y atenta drásticamente con la idea de identidad e imagen corporativa.

Aunque una empresa carezca de un programa formal de identidad, debe buscarse la homogeneidad en la presentación de los recursos impresos evitando así lo que ya es frecuente : que sea el impresor quien decide cómo serán las tarjetas de presentación, las facturas o los flyers y si el impresor es otro, las impresiones serán distintas. De la misma manera, si un director de área es relevado por otra persona, este último hará las cosas a su propio estilo en medida que la empresa lo permita. No imagino a un McDonalds adornado con tiras de popotes y papel picado porque se encuentre en provincia y el gerente decida que así “se ve bien” o preparando las hamburguesas a su propio estilo porque él dice que así saben mejor. O tampoco imagino a un escritor diciéndole a su editor cómo quiere que sea la retícula, la caja de texto, la tipografía y su puntaje, el tipo de papel, el sistema de impresión o el sistema de empastado. En este ejemplo, el escritor puede y quizá debe participar en el diseño, pero no decide las cuestiones elementales de diseño. Para eso está el experto en diseño editorial.

¿Por qué existen entonces los protocolos y los formatos para cartas o memorándums? Entonces no sería necesario que la secretaria fuera a una escuela y confiemos plenamente en que ella encontrará la mejor manera de realizar sus escritos, porque además así se siente más cómoda y libre.

Es indudable que una empresa seria y directores, jefes, coordinadores y ejecutivos verdaderamente profesionales, confíen en la utilidad, en los beneficios, en las ventajas y en el poder aglutinador de ideologías empresariales que tiene un programa de identidad corporativa o la participación de profesionales en diseño para cosas que tienen que ver con diseño: desde un manual de uso interno hasta una presentación ejecutiva o una campaña de comunicación pública. Un profesional en diseño garantiza la funcionalidad y los valores estéticos adecuados, así como la estandarización de la imagen de la empresa. Pensar en el estilo propio de un sujeto para realizar por ejemplo un texto (del tipo que sea) en una empresa, es un error y sin duda habla de la falta de profesionalización y visión correcta de las necesidades de identidad de una empresa.

soy de mis hijos

Qué difícil es vivir en esta tormenta de tiempos, de actividades, tormenta de personas y de necedades. Es difícil que esta guerra de sobrevivir se gane con autocompasión. Sin embargo, yo creo que esta lucha diaria está inspirada y aderezada y se encuentra perfumada por los amores, por esos amores lindos y sonrientes, por esos amores cariñosos y egoístas que me besan y me abrazan y que me llenan de colores sonrientes. Esos amores míos que he construido con pasos firmes y con pasos preocupados por la felicidad, por la tranquilidad, por el desarrollo de consciencias alegres y constructoras. Esos amores míos que son de ustedes, mi Toto y mi Rena, esos amores míos que ustedes han comprado de mi, arrancado de mi y restaurado en mi. Saben que los amo, que no tengo nada más seguro en mi vida que el cariño que ustedes me dan con amores de sabores y amores de colores. Soy feliz por ustedes y por ustedes es que vivo, soy feliz con su abrazo y sin su abrazo muero, soy feliz cerca de ustedes y lejos soy huérfano. Son mis hijos y soy de ustedes, mis creadores.


Sergio Guillén

13 de mayo de 2011